ETIOPÍA: LA NUEVA CHINA

 

ETIOPÍA: LA NUEVA CHINA

 

Etiopía es un estado que desde su independencia como colonia ha sufrido una gran cantidad de conflictos, gobiernos totalitarios, guerras y a grandes rasgos miseria. Sin embargo, todo esto ha empezado a cambiar con la entrada del nuevo siglo, en el que su PIB se ha multiplicado por 10,22 y su PIB per cápita por 6, en menos de 20 años llegando a alcanzar las mayores tasas de crecimiento del mundo. También ha conseguido un gran acercamiento a Pekín y Washington e incluso recientemente han firmado la paz con Eritrea tras un largo conflicto bélico. En otras palabras, desde los años 2000 podemos vislumbrar el nacimiento de una posible futura potencia africana pese a eso, aún le queda superar la arraigada pobreza de este país de 100 millones de habitantes.

 

UN PASO POR LA HISTORIA

Para poder ver lo que significa este gran cambio debemos remontarnos al pasado y situarnos en la situación de este país en el siglo XX. Etiopía es el único país que a principios del siglo XX pudo repeler la invasión italiana y establecer un imperio en la zona. En 1930 llega al poder el emperador Haile Selassie I que establece un gobierno absoluto fundamentado en el poder divino que se mantendrá hasta que en 1936 la Italia de Mussolini consigue conquistar el país y establecerá un régimen hasta la derrota de Italia en África en la 2ª guerra mundial. El trono le será devuelto al emperador que se mantendrá en el trono hasta la década de los 70 en las que una hambruna desembocará en una revolución de carácter marxista que acabará con el control del país. Posteriormente, El país se verá azotado por una guerra civil y diversos conflictos bélicos que acabará con el derrocamiento del gobierno y la independencia de la región de Eritrea además de dejar al país destruido. Tras esta situación el gobierno pasó a manos del frente democrático revolucionario etíope, que mantiene el control hasta la actualidad con un sistema de partido único y autoritario.

EL ALUMNO AVENTAJADO DE PEKÍN

Con una situación histórica tan convulsa es difícil de creer que haya sufrido un crecimiento tan gigantesco. La respuesta es simple, Etiopía ha seguido los pasos de china.

El catalogado como uno de los nuevos “Lion Kings” por la revista THE ECONOMIST ha replicado el modelo chino para prosperar económicamente. Este modelo se basa en la elevada inversión pública en infraestructuras y construcción de edificios (parques industriales, y estaciones hidroeléctricas, entre otros) además de la devaluación de su moneda, el birr, para reforzar a la exportación (medida exitosamente implementada) la atracción de inversión extranjera directa, impulsada por la estabilidad política del nuevo siglo y los incentivos fiscales , también jugó un papel fundamental, ya que logró que se impulsaran una gran multitud de sectores, como el textil donde actualmente podemos ver empresas como Calvin Klein con grandes fábricas en el país. También destaca la brillante decisión de hacer que las empresas públicas etíopes funcionen con gran autonomía y se gestione en gran medida como empresas privadas, destaca el caso de Etiopía Airlines que actualmente es la mayor aerolínea de África y cuyo funcionamiento es similar a una empresa privada a pesar de tener un 100% de titularidad pública

 

 

UN FUTURO PROMETEDOR

Para poder hablar sobre el impresionante futuro que probablemente le espere a Etiopía es imposible no nombrar al que ha sido el protagonista de los cambios más recientes en el país Abiy Ahmed, que desde su nombramiento como primer ministro ha puesto en práctica reformas creídas impensables para este país situándolo incluso a las puertas de la democracia.

Abiy Ahmed Ali recibiendo el  premio  Nobel de la Paz
Abiy Ahmed recibiendo el Premio Nobel
 de La Paz

Este líder desde que en 2018 se convirtió en primer ministro ha vuelto a introducir la libertad de expresión en el país (muy deshonrada en los últimos años del país) además de liberar presos políticos y periodistas que estaban detenidos o exiliados, ha firmado la paz con Eritrea un conflicto activo desde la independencia de la misma en la década de los 90 y ha convocado elecciones democráticas para 2020 (no han podido celebrarse por la alerta sanitaria, pero se planea realizarlas en 2021).Por esta razón el primer ministro recibió el premio Nobel de la paz en 2019.

En definitiva, es probable que estemos a las puertas del nacimiento de una nueva democracia en África que podrá servir de ejemplo para los países de la región acompañada además de un gran crecimiento económico. Es de esperar que en el futuro se escuche mucho de este país.

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