EL RESPONSABLE DE LAS CRISIS
Un tema común de las conversaciones de bares es hablar de la crisis. Las personas al discutir sobre sus culpables suelen enumerar una serie de culpables habituales: los estados, los bancos comerciales, el mercado libre, las multinacionales y los ricos. Pero en pocas ocasiones se nombra a los bancos centrales, a los que en gran medida les podemos atribuir crisis tan graves como la gran depresión y en última instancia la responsabilidad de la crisis del 2008.
¿Qué son los bancos centrales?
Los bancos centrales, para quien no lo sepa, es la entidad que posee el monopolio de la producción y distribución del dinero oficial en una nación o bloque de países. A su vez, es la institución que dicta la política monetaria para regular la oferta de dinero en la economía.
Esto les otorga un gran poder y sus decisiones, aunque poco conocidas, afectan de una forma increíble al conjunto de la sociedad, siendo el responsable del dinero así como, el prestamista en última instancia de los bancos comerciales que usamos comúnmente en nuestro día a día.
Un paso por la historia
La política ejercida por los bancos centrales ha ido variando conforme variaba la política monetaria. Desde la creación del patrón oro se han aplicado diversos sistemas como Bretton Woods y el sistema de cambios flotantes, en el que nos encontramos actualmente.
Este sistema de cambios flotantes permite que la moneda no deba ser respaldada por una mercancía al estar basada en la confianza. Por tanto, es capaz de financiar sin limitación material lo que considere oportuno.
La gran recesión
La crisis del 2008 ha sido consecuencia de una brutal expansión del crédito, ya que tras el 11S al empujar los tipos de interés a tipos del 1% los bancos se podían permitir prestar sin restricción a individuos sin solvencia o de poca confianza. La entidad que permitió que se produjera es en última instancia el banco central, banco de bancos, al ser la entidad que al refinanciar a todos los bancos indiscriminadamente de sus activos y consecuentemente, al no proporcionarles incentivos para preservar su liquidez. Esta presencia del banco central, que proporcionaba seguridad a los bancos comerciales provocó que los mismos emprendieran una gran expansión, que no estaba respaldada por ahorro real.
¿Una alternativa?
Varios economistas han planteado alternativas a este sistema monetario que provoca crisis cíclicas. Una de los postulados que han cobrado más fuerza desde la última crisis es el de Friedrich Hayek, en el que el monopolio de emisión la moneda deja de estar en manos de los bancos centrales y pasa a existir un sistema donde los bancos comerciales pueden emitir su propia moneda. Este sistema probablemente convergerá en la vuelta a un patrón oro internacional que limitaría las expansiones crediticias así como las malas inversiones dentro de la economía.
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